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¿Estás estresada y no te has dado cuenta? Ponte en sintonía con tu cuerpo y aprende estas 5 maneras de cómo el estrés podría estar afectándote.

Cuando sucede algo que te estresa, o simplemente estás estresada en general, se liberan hormonas en tu cuerpo que pueden generar daños en tu organismo o actividades de la vida diaria.

  1. El estrés afecta tu estado de ánimo. Este primero es bastante obvio, me atrevería adivinar que esto es lo que la mayoría de la gente asocia con cómo se siente el estrés. Estrés = mal humor. ¿Te identificas? Esto va desde ansiedad, no poder concentrarse, tristeza, irritabilidad, enfado… básicamente todos los sentimientos, las investigaciones incluso han demostrado que el estrés crónico puede provocar o empeorar algunos trastornos del estado de ánimo. ¡El efecto que tiene el estrés en nuestro estado de ánimo es real y serio!

  2. Tu digestión. El estrés puede afectar la forma en que los alimentos se mueven a través del cuerpo, lo que puede provocar estreñimiento o diarrea, también, es mucho más probable que experimentes acidez estomacal y reflujo cuando estás estresada. Cuando estamos pasando por esta situación es mucho más probable que busquemos alimentos que están demasiado procesados, demasiado salados o muy dulces, llenos de aceites que son perjudiciales para la digestión.

  3. Niveles de energía. Otra cosa que sucede cuando tu cuerpo libera hormonas en una situación estresante es la liberación de glucosa, tu hígado produce glucosa extra para darle a tu cuerpo un pequeño impulso de energía para asumir el estrés, esto es lo que queremos que haga nuestro cuerpo si se trata de una situación muy estresante, pero cuando estás crónicamente estresada, tu cuerpo está produciendo constantemente esas hormonas, enviándote a una montaña rusa de energía que no es necesaria.

  4. Claridad mental. La claridad mental y el estado de ánimo van de la mano, cuando estás estresada, tu mente casi siempre se centra en el estrés y los sentimientos que lo acompañan en lugar de la tarea que tienes entre manos. Para colmo, el estrés también puede desencadenar dolores de cabeza, o si eres alguien que ya sufre de estos dolores, el estrés puede empeorarlos, esto hace que sea casi imposible tener claridad y enfoque.

  5. Dormir. El estrés afecta el sueño muchísimo, si te cuesta conciliar el sueño, sabes que la lucha es real. Los estudios han demostrado que el estrés afecta negativamente la calidad y cantidad del sueño, por ejemplo, cuando estás despierta por la noche pensando demasiado en lo que te está estresando en lugar de dormir. Lo peligroso del sueño y el estrés es el ciclo que se puede crear: estrés = menos sueño = más estresada = menos sueño... ¿Te haces una idea? La falta de sueño también tiene un efecto dominó en otras áreas de nuestra vida, cuando no dormimos lo suficiente, no estamos tan motivadas para mover el cuerpo, nuestro metabolismo se pone más lento, nuestros antojos de alimentos son diferentes, nuestros cambios de humor son más repentinos, etc.

Reconoce estos síntomas del estrés, y toma una pausa cuando sea necesario para evitar molestias y repercusiones graves, tu salud es lo más importante, a veces nos estresamos por cosas que no son necesarias, cuando comiences a sentir que el estrés te está ganando realiza una pausa y pregúntate si vale la pena causar tanto daño en tu cuerpo.

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