Volver a
14 de Marzo
Vamos a hablar de un tema que seguro ya muchas de Nosotras hemos experimentado y que sino, ¡con seguridad hemos presenciado que lo viven mujeres un poco mayores! La presión por casarnos, construir una vida en familia y tener una pareja estable que se empieza a experimentar después de cierta edad, puede ser tan angustiante que necesitamos decir: ¡no más!
Lo primero que debes saber es que ¡no existe una edad perfecta para nada! Más importante que eso es sentirnos preparadas y encontrar a la persona correcta. Debemos dejar de pensar que nuestro proyecto de vida está 100% enfocado en casarnos y construir una familia porque… ¡No es así! Claro que está bien soñar con el hombre perfecto y una vida en pareja, pero sin afanes y sin verlo como la única meta. También está súper permitido ser diferente, no soñar con el matrimonio, ni con tener hijos, y no hay razón para ocultarlo o sentirse mal por eso. Recuerda que eres libre de tomar tus propias decisiones y elegir sobre tu vida.
Nunca olvides que tú eres una mujer completa, que la idea de la media naranja pasa a un segundo plano cuando entiendes que tú sola puedes con todo, que estás hecha para grandes cosas y que una pareja debe llegar a complementarte, pero nunca a completarte. No te conformes con un amor a medias por miedo a estar sola, no permitas jamás un maltrato y no elijas casarte con el hombre equivocado solo por seguir un patrón que hace mucho tiempo dejó de existir.
El amor viene en muchas formas y no solo se recibe de la pareja. Rodéate de buenos amigos, crea lazos de unión fuertes con tu familia, haz tu círculo social cada vez más y más grande y verás cómo encontrarás representaciones de cariño transformadas en buenas amistades, que te alejan de esa dependencia emocional que, muchas veces, podemos generar hacia nuestra pareja. Una dependencia que, en ocasiones, se puede volver tóxica y quitar mucho más de lo que da.
Llegó el momento de dejar de idealizar ese amor romántico como un aspecto fundamental de la vida. Es hora de darnos cuenta de que cada una de Nosotras, puede elegir cómo vivir su relación de pareja, en qué momento casarse o decidir estar sola. Que no hay una edad específica para tener hijos, que el famoso tren ya no deja a nadie y que la relevancia que le damos a cada aspecto de la vida depende de Nosotras y de nadie más.
Esta es una invitación a que construyas tu camino a partir de tus propios ideales, que seas sincera contigo misma, que, si esa relación no te hace feliz, ¡no sigas ahí! Vivimos en un mundo lleno de posibilidades donde, el único ideal, ya no debe ser casarse y tener hijos antes de los 30. No te conformes, construye tu proyecto de vida según tus ideales y ¡no te desvíes!
Déjanos tus comentarios