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Siempre he tenido el pelo rizado, pero por una extraña razón quería luchar contra él, ¡cambiarlo para siempre! Me realicé procedimientos extremos para alisarlo, pero un día mi pelo dejó de tener brillo. Me preguntaba por qué estaba pasando eso, hasta que leí un artículo donde decía que someterse a fuertes tratamientos, le hacía daño al pelo. Ese día me dije a mi misma que nunca más volvería a exponerlo a fuertes tratamientos y decidí dejarlo naturalmente rizado. No se los voy a negar, ¡fue difícil! Personas de mi familia no aceptaban mi decisión, pero eso no me afectó.

Para mi, tener un pelo sano es lo principal y por eso tomé la decisión de cuidarlo como un tesoro, esto fue lo que hice:

  1. Empecé a usar linaza para poder rizar mi pelo; para esto, lo dividía por secciones y aplicaba el tratamiento por partes y con un atomizador.

  2. Busqué productos naturales para el pelo y empecé a identificar cuáles eran los que más me servían a mi.

  3. Decidí cortar mi pelo para que nacieran nuevos rizos, ya que tenía partes en las que ya no se encrespaba.

Para nadie es un secreto que hubo un tiempo donde mi pelo no era ni rizo ni lacio, pero eso era debido a los cambios que estaba haciendo para retornarlo a su estado natural ¡rizado! Como todo en la vida, esto tomó un poco de tiempo, pero finalmente lo logré. Ahora les puedo puedo decir ¡con total sinceridad!, que estoy súper feliz con mi pelo y si pudiera volver a atrás no cambiaría nada, ¡rompí los estereotipos y les aseguro que fue lo mejor que pude haber hecho!

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