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5 de Julio
El flujo blanco es uno de los fluidos más normales de nuestro cuerpo durante el ciclo menstrual, aunque sabemos que puede ser incómodo, hace parte de la vida de muchas de Nosotras. Y aunque tal vez ya lo conoces, ¿sabes qué trata de decirnos? o ¿cuándo puede ser un problema? No te preocupes, si es así, estamos aquí para resolver todas tus dudas y explicarte por qué se da el flujo blanco… ¿Es normal o no? ¡Te contamos!
Una parte importante del ciclo menstrual de una mujer es el flujo blanco, ya que este es completamente normal y puede aparecer en cada uno de los días o etapas del mismo, variando su cantidad o consistencia a lo largo del mes.
Muchas mujeres notan un aumento en el flujo blanco justo antes de que comience su período, donde es mucho más abundante y espeso, pero, ¡nunca debe tener olor! Si notas que viene acompañado de incomodidad, picazón o un olor extraño, puede significar alerta.
¡El flujo es natural durante todo el ciclo! Es la forma en que nuestra zona V se mantiene limpia y evita las infecciones, por lo tanto, estará presente en cada una de tus fases con algunas variaciones comunes, sin embargo, sí existen algunas razones por las que puedes experimentar otras alteraciones en tu flujo, haciendo que se vea un poco diferente a como lo notas regularmente:
El flujo blanco forma parte del ciclo menstrual normal de una mujer. Durante diferentes etapas, los niveles de hormonas cambian y pueden afectar la cantidad y la textura del flujo vaginal. Es por ello que no debes alarmarte si algunas veces lo ves más espeso, en mayor o en menor cantidad, ¡es completamente normal! Sin embargo, si además aparece con olores fuertes o molestias, es una alerta roja. Sigue leyendo para descubrir cuál es tu caso.
Si estás utilizando anticonceptivos hormonales, como la píldora anticonceptiva, el DIU, inyección mensual, entre otros, es posible que experimentes un aumento en el flujo vaginal. ¡No te preocupes, es una reacción normal a los cambios hormonales que estás teniendo!
Cuando se presenta un flujo blanco, espeso, con olor extraño, además de dolor, picazón o ardor, puede ser una señal de infecciones por hongos. Algunas de estas infecciones, como la candidiasis vaginal, genera gran incomodidad en tu Zona V, la cual es un signo de alarma para ti. Recuerda consultar con tu ginecóloga de confianza para recibir el mejor tratamiento.
Una Infección de Transmisión Sexual (ITS) puede evidenciarse a través del flujo, ya que este presenta algunas variaciones en su color, olor y textura. Al contraer una infección de este tipo, el flujo se torna amarillo, textura demasiado espesa y un olor bastante fuerte, incluso, algunas infecciones como la clamidia o la blenorrea pueden generar que este aparezca teñido de sangre, acompañado de picor o dolor al orinar.
Si has tenido relaciones sexuales sin protección o crees que podrías estar en riesgo, ¡es importante hacerte pruebas y buscar tratamiento si es necesario! Recuerda que este tipo de afecciones pueden evitarse con el uso de métodos anticonceptivos de barrera.
Si presentas un flujo blanco o grisáceo con un fuerte olor e incomodidad y recientemente has tenido relaciones sexuales sin protección, es probable que puedas tener vaginosis bacteriana, una infección vaginal común.
La vaginosis bacteriana suele ser más común en mujeres con un hábitos inusuales de higiene en su Zona V, enfermedades de base como la diabetes, sexualmente activas o con una cavidad urinaria más estrecha. Si notas un cambio en el olor y color de tu flujo vaginal, ¡consulta con tu médico para obtener tratamiento!
En algunas mujeres, la menopausia puede llegar antes de la edad en que normalmente lo hace, a esto se le llama menopausia precoz. Este padecimiento puede causar cambios en el flujo vaginal, incluido un aumento en el flujo blanco. Si crees que podrías estar experimentando síntomas de menopausia a una edad temprana, ¡habla con tu médico para obtener orientación!
Los cambios hormonales que sufre nuestro cuerpo durante el embarazo podemos experimentar un aumento en el flujo blanco. ¡No te alarmes! Esto es completamente normal! Es una respuesta natural del organismo ante posibles infecciones para proteger al bebé, creando una especie de barrera protectora con el mundo exterior.
Muchas veces creemos que los síntomas que pueden aparecer podemos tratarlos nosotras mismas, con ayuda de remedios caseros, si bien estos ayudan, recuerda que el acompañamiento de un profesional es lo mejor. Si experimentas alguno de los siguientes síntomas junto con el flujo blanco, consulta con tu ginecólogo de confianza:
Picazón intensa en la Zona V.
Ardor al orinar.
Cambios en el olor del flujo vaginal.
Sangrado vaginal inusual.
Dolor abdominal o pélvico.
Recuerda, siempre es mejor prevenir que lamentar. Es por ello que debes conocer tu cuerpo y familiarizarte con lo que quiere decirte. Si tienes alguna preocupación sobre tu salud vaginal, ¡no dudes en consultar para que salgas de dudas y te asegures de que nada malo ocurre con tu cuerpo y tus ciclos!
Nosotras queremos que tu salud íntima y tu relación con tu cuerpo sean las mejores es por ello que para mantenerte protegida durante todos los días de tu ciclo, te recomendamos usar Protectores Diarios Nosotras, que te harán sentir más cómoda, limpia y protegida. Recuerda que el flujo blanco es completamente normal y puede darte más información sobre tu salud de lo que crees.
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